Tras la marcha por el centro de Melo, el colectivo 8M de Cerro Largo hizo pública una proclama donde nuevamente insiste en la lucha por derechos y en reivindicación “de todos los modos en que se expresa la violencia machista en nuestras sociedades”.
“Marchamos para hacer visible un trabajo que nadie reconoce. Reivindicamos que las tareas de cuidados sean reconocidas y valoradas. Exigimos la corresponsabilidad en las tareas de cuidado, para que no sigan siendo trabajo no remunerado ni reconocido para las mujeres y disidencias.
Marchamos para reivindicar el derecho a la autonomía económica. Las mujeres tenemos derecho al trabajo digno y libre de discriminación salarial. Repudiamos el acoso sexual que sufrimos muchas mujeres y disidencias en todos los ámbitos de nuestras vidas, como laboral, educativo, y en la mayoría de los espacios que transitamos. Repudiamos el acoso callejero.
Marchamos porque queremos ser protagonistas de nuestras vidas, de nuestra salud y de nuestros cuerpos, sin ningún tipo de presión estética, biologicista, hegemónica y heteronormada. Nuestros cuerpos no son mercadería ni mercancía y nuestros ciclos vitales no deben ser considerados como enfermedades”.
“(…)Exigimos VIVIR con los mismos derechos y libertades, exigimos transitar las calles sin miedo a toda hora, exigimos ser escuchadas y declarar esta emergencia nacional, porque reiteramos ¡NOS ESTÁN MATANDO! y esta es una emergencia que nos compete a todas las partes de la comunidad y de la que el Estado es responsable”.
