COMUNICADO DEL PIT.CNT

El Plenario Departamental, reunido el día 15 de abril, resuelve adherirse al comunicado que se expresa en la última Mesa Representativa Ampliada del Pit.Cnt para su difusión a nivel departamental:

1- Ante los hechos de público conocimiento en torno al Liceo IAVA, dependiente de la Educación Secundaria, la MRNA (Mesa Representativa Nacional Ampliada) del PIT-CNT reunida en el día de hoy Declara:

– Desde la asunción de las actuales autoridades del CODICEN de la ANEP y Educación Secundaria, y en particular de la aprobación de la LUC con la reestructura organizativa de la ANEP, asistimos a un proceso de creciente aumento del verticalismo, autoritarismo y persecución en la órbita educativa.

– La misma se ha expresado en sumarios a compañeros y compañeras, tanto dirigentes como de los núcleos de base, y sanciones por la adopción de medidas sindicales. Asimismo, en intentos de desarrollar procesos “disciplinarios” sobre estudiantes agremiados y de desconocimiento de la organización estudiantil, se les niega de forma permanente los espacios de diálogo o negociación.

– Ese proceso se agrava ante la resolución infundada de trasladar el salón gremial del IAVA. Ese proceso implicó el desconocimiento del edificio, su historia, su desarrollo institucional y comunitario, a la vez que un férreo ataque a la organización estudiantil bajo argumentos qué faltan a la verdad, colocando a los estudiantes en la posición de explicar que no son ellos quienes impiden la accesibilidad sino las autoridades que no resuelven los verdaderos problemas de la educación.

– Es de destacar que el núcleo sindical del liceo, perteneciente a nuestra filial FENAPES, respaldó las acciones de los estudiantes. Es en este marco en el cual se amparó el Director de dicho centro educativo, lo cual fuera cuestionado por las autoridades de Secundaria.

– La resolución de un proceso de sumario contra el Director por “insubordinación”, citando normativa de la dictadura ya derogada no solo es improcedente, sino que constituye una provocación y un atropello sobre las libertades democráticos y el buen funcionamiento de las instituciones educativas. Dinamitan procesos pedagógicos de diálogo e intercambio a la hora de resolver conflictos, para instalar una lógica autoritaria y verticalista de acatamiento acrítico de resoluciones -así sean absurdas-, y constituye un precedente nefasto que en última instancia amedrenta al conjunto del colectivo docente.