Desde la Gerencia Regional de OSE confirman que antes de fin de año se estaría habilitando la usina portátil en la zona de Arachania, lo que permitiría a los vecinos hacerse de agua potable en su localidad.
Según informó el ingeniero Pablo Decoud, si bien la pandemia ha enlentcido algunos trámites, actualmente se cumple con el proceso para la instalación de la UPA que permitirá la potabilización del agua: “estamos desde ya hace bastante tiempo avanzando en las fases previstas para la instalación de un sistema de abastecimiento para Arachania y Ñangapiré; en este momento en lo que estamos es en el inicio de las obras de fundación de la obra civil para el montaje de la usina potabilizadora, una vez seleccionado el predio y acordado con la Intendencia, porque es una obra coordinada con la Intendencia de Cerro Largo que fue quien puso a disposición de OSE una cartera de predios que tiene con la posibilidad de ubicar la planta potabilizadora, y ya definido el proyecto ejecutivo para la obra, empezaremos con las acciones concretas en el campo”, manifestó el jerarca, quien explicó que la cuba, que es la parte de la usina donde se realiza el proceso de potabilización, y otras piezas especiales “más grande” ya están en el departamento: “todo lo que son bombas, motores y actuadores están en proceso de llegar a Cerro Largo”, agregó.
Decoud recordó que el objetivo de OSE es al mes de diciembre tener en funcionamiento esta planta: “lo que sucede es que, como consecuencia de la pandemia, hizo que la actividad plena se modificara, eso obligó a cambiar algunos cronogramas pero creemos que todavía estamos con el tiempo suficiente como para alcanzar ese objetivo porque lo que estaba previsto para este verano era la usina operativa y funcionando, o sea tomando agua del río, procesándola y entregando agua potable, un tanque de almacenamiento y distribución, y uno o dos puntos de suministro de agua segura para que la población pudiera tener un lugar a donde ir a buscar agua”, afirmó.
