Dra. Quintana: “este programa busca que aprendamos a demostrar amor y a poner límites”
Este martes, en sala de videoconferencias de Antel, se llevó a cabo el lanzamiento del Programa “Familias Fuertes”, que trabaja en el fortalecimiento de la comunicación entre padres e hijos adolescentes.
El mismo, pertenece a la Organización Panamericana de la Salud (OPS), y será implementando por primera vez en algunos departamentos del país – entre ellos Cerro Largo- en 15 familias con un menor de entre 10 y 14 años, y al menos un adulto, (madre, padre o tutor) en convivencia.
“Familias Fuertes” se implementará a través de 7 talleres de dos horas de duración cada uno, en el cual se trabajará en el fortalecimiento de lazos familiares, la mejora de la comunicación, la demostración de amor y el establecimiento de límites desde el amor.
A través del abordaje de situaciones cotidianas sencillas, el adolescente obtendrá herramientas para enfrentar futuras situaciones complejas con seguridad. Durante los talleres se trabajará con fuerte hincapié en la importancia de la comunicación así como en el establecimiento de sueños y metas de vida, reglas y acuerdos en la interna de la familia y responsabilidades del adolescente en el núcleo familiar, informó la Dra. Lorena Quintana, del programa Adolescencia del MSP, quien explicó además que el enfoque preventivo desarrollado en estos talleres resulta de vital importancia, teniendo en cuenta que el 80% de la mortalidad en adolescentes en Uruguay es por suicidios, homicidios y accidentes: “el objetivo es fortalecer los lazos familiares, mejorar la comunicación entre padres e hijos. Este programa tiene un slogan que nos ayuda mucho a poder explicarlo que es *Familias Fuertes, amor y límites*, y cuando hablamos de amor, hablamos de demostrar amor y cómo cuesta poder comunicar esto con palabras, y que importante es que el adulto lo haga con el adolescente porque después va a recibir la devolución y el adolescente va a saber decir papá, mamá, gracias, te quiero. Entonces, demostrar amor pero también saber poner límites con amor porque si hay una palabra que es muy importante y habla también del amor es el límite, entonces este programa también enseña a poner límites con amor, cuáles son las normas y las reglas a la interna de las familias, mi responsabilidad como adolescente en mi casa”, manifestó la profesional, quien insistió en la importancia de la convivencia y el día a día entre los adolescentes y sus referentes adultos: “se trabaja sobre lo que pasa en el día a día en la casa, situaciones sencillas para poder aprender el adolescente y después enfrentarse a situaciones no tan sencillas donde mis actos tienen consecuencias. Entonces, qué mejor que aprender cómo son los límites y las normas en casa con amor”, agregó.
Quintana dijo que aquel adolescente que se crió con límites en su hogar, entendió lo que son las normas, es un adolescente que está seguro y luego sale a la sociedad con seguridad: “este programa busca que aprendamos a demostrar amor y a poner límites; la base de este programa es la comunicación, cómo hacemos para comunicarnos con nuestros adolescentes”, sentenció.
Por su parte, la Directora departamental de Salud, Dra. Mariela Ancheén, recordó que las familias interesadas en participar del programa pueden anotarse a través del correo electrónico, familiasfuertes@msp.gub.uy, donde va el nombre del adolescente que va a participar, el teléfono de contacto y nombre de los adultos referentes: “desde Familias Fuertes luego nos pondremos en contacto y se organiza el cronograma, se los invita; van ser siete talleres que son semanales de aproximadamente dos horas de duración, donde hay una parte donde están solos, por un lado los jóvenes y por otra parte los adultos, después se comparte una merienda y se termina con un espacio común donde están adultos y jóvenes compartiendo para hacer el cierre de esa jornada”, expresó, recordando que el único requisito es la existencia de un / a adolescente de 10 a 14 años y un adulto responsable, en situación de convivencia.
Vale mencionar que el programa está basado en estudios comportamentales realizados por la Universidad de IOWA, Estados Unidos, y en Uruguay cuenta con el apoyo del Ministerio de Salud Pública, la Red de Atención Primaria de Salud, UTE, OSE, Antel e INAU.