Este año llegaron unas 100 canastas menos que en 2023
Calcagno: “vinieron mucho menos mochilas que el año pasado, y eso evidencia la desocupación que hay en la industria de la construcción”
Comenzó la entrega de los kits de útiles que el Fondo Social de la Construcción otorga a hijos/as de trabajadores de esa industria.
Se trata de materiales escolares para niños/as en edad preescolar, escolar y liceal.
Roque Calcagno informó que la distribución se realiza de lunes a viernes, en el horario de 17 a 19 horas en el local sindical ubicado por calle Bulevar Mata casi Colón: “los útiles llegaron el viernes, estuvimos todo el fin de semana aprontando todo para comenzar la entrega esta semana y lo estamos haciendo todos los días de 17 a 19 horas”, manifestó, recordando que este beneficio es para los trabajadores de la construcción que aporten al Fondo Social de la Construcción: “durante el mes de diciembre y enero, incluso habilitamos una semana más en febrero para los retrasado, se tomaron inscripciones y entre los requisitos está la presentación del recibo de sueldo de enero de 2023 para acá y quiero aclararlo porque me ha escrito un montón de gente por las mochilas y en realidad es una cosa de los Fondos Sociales, aparte del recibo tiene que tener el descuento a los Fondos Sociales, y es para los hijos de los obreros de la construcción“, indicó.
Calcagno confirmó que este año se recibieron unas 100 mochilas menos, lo que deja en evidencia el planteo que desde hace ya un tiempo se hace desde el SUNCA relacionado con el nivel de desocupación para los trabajadores de esta industria en Cerro Largo: “recibimos canastas para preescolares, para niños de 3, 4 y 5 años, en la mochila viene todo lo que piden menos la túnica del preescolar, después la canasta para los escolares trae la mochila con todas las cosas adentro más las botas y el impermeable, y para los liceales todo lo necesario además de la tabla de dibujo de tercero para adelante, pero lo cierto es que vinieron mucho menos mochilas que el año pasado, andamos en el entorno a las 400 mochilas que el año pasado fueron más de 500, y eso evidencia la desocupación que hay en la industria de la construcción, que espero que se revierta este año con el montón de emprendimientos que están por empezar“, sentenció.