Ley 17515: Trabajadoras Sexuales se movilizan contra Proyecto de Ley

Afirman que los cambios propuestos por legisladores oficialistas formalizarían la relación de dependencia y darían poder a los proxenetas.

Colectivos de trabajadoras sexuales se movilizan hoy frente al Palacio Legislativo en protesta contra una propuesta de legisladores oficialistas para modificar la ley 17515, que regula aspectos de esta actividad. El proyecto, firmado por los diputados Eugenia Rosello, Pedro Jisdonian y Martín Sodano, está a estudio de la Comisión de Legislación del Trabajo y tiene como objetivo tutelar el trabajo sexual e introduce cambios a la normativa vigente, entre ellos, eliminar el Registro Nacional de Trabajo Sexual, que está a cargo de los Ministerios de Salud Pública y del Interior.

Carina Nuñez, representante de uno de los colectivos, criticó duramente la propuesta: “Es una ley de copia y pegue, que lo que hace es formalizar la relación de dependencia del trabajo sexual, dándole carácter de patrón al proxeneta y a los dueños de los locales de oferta de servicios sexuales.”

Nuñez enfatizó que las trabajadoras sexuales no necesitan tutelas, sino derechos. “De tutela no precisamos nada, lo que precisamos son derechos, no tutelas, porque no somos ni niñas, ni niños, ni personas con discapacidad para no saber qué es lo que estamos haciendo,” afirmó.

Nuñez también se refirió a la falta de consideración de las propuestas previas presentadas por los colectivos de trabajadoras sexuales: “En el 2021 introdujimos la ley con las compañeras del sindicato de trabajadoras sexuales y de otras en el Parlamento y ellos, siendo parte de esa comisión, no hicieron estos aportes que podrían sumarlos a lo que nosotros ya presentamos. Deciden, entre ellos tres, sacar algo nuevo de un copia y pegue de las versiones taquigráficas de los tres años que estuvimos yendo a la Comisión de Trabajo en vez de reunirse con nosotras para que entiendan el porqué de cada una de las cosas.”

Respecto a la eliminación del Registro Nacional de Trabajo Sexual, Nuñez explicó que es una propuesta de las trabajadoras sexuales, pero criticó la forma en que se ha implementado. “Copiar y pegar es facilísimo, lo hace un nene de ocho años, capaz por eso la ley dice tutela, porque está hecha para ese tipo de población, para los que no saben más que copiar y pegar,” dijo.

En cuanto a la diferencia entre el registro y el carné, el representante de las trabajadores sexuales aclaró: “Nosotras queremos cuidar nuestra salud. Nosotras necesitamos pasar a médico. Lo que no precisamos es que la policía sepa qué cantidad de veces nosotros pasamos a médico, cuántos condones nos entregan. No precisamos que la policía sepa eso.”

Nuñez también criticó la Comisión Nacional Honoraria de Protección al Trabajo Sexual, señalando que “es una comisión que nunca sirvió para nada,así quepor mí que le pongan una bomba.”

En relación a la seguridad social, Nuñez destacó que es la principal demanda de las trabajadoras sexuales: “Es la primer demanda que tenemos. Imagínate que tenemos setenta mil personas ofertando servicios sexuales, solamente 218inscriptas en el BPS y más de 700 compañeras con más de 70 años, sin prestaciones.”

Nuñez expresó sus expectativas sobre el trabajo parlamentario: “Nosotros lo que en realidad esperamos es que se nos deje de invisibilizar, que los senadores, que los diputados, sabiendo todo lo que pasamos y todas las veces que le pedimos ayuda para que nos ayudaran a modificar, que si la ley que presentábamos tenía cosas para modificar que por favor le hicieran las aplicaciones, le hicieran las modificaciones, le hicieran sus aportes. Dos años estuvimos trabajando en esa ley que presentamos. Nunca imaginé que prefirieran salir ellos a presentar algo contra nosotras, nunca lo imaginé, nunca pero nunca lo imaginé.”

Nuñez concluyó que lo que se está planteando es “un pisoteo, es un ninguneo. Están legislando cosas sin nosotras, están volviendo a darle el poder al proxeneta, a los patrones y los dueños de las whiskerías”

Al ser preguntada si esperan revertir esta situación, Nuñez fue categórica: “No, no, no, no. Si ellos tienen la mayoría, ellos tienen el poder, ellos pueden hacer lo que se les da la gana, porqué ellos quiénes son? Son los poderosos y son los que deciden que el Estado siga siendo un Estado proxeneta.”