VENTAS Y ALQUILERES EN EL BALNEARIO REGISTRAN UNA SIGNIFICATIVA BAJA EN RELACIÓN A AÑOS ANTERIORES
El cierre de la primera quincena de enero generó un movimiento que no colma las expectativas. Operadores inmobiliarios del balneario dijeron que lo que se preveía al comienzo de la temporada, no se concretó; la demanda por alquileres no ha sido la esperada y en cuanto a ventas de inmuebles bajo entre un 50 y un 60%.
El responsable de uno de los negocios inmobiliarios del balneario opinó que la no presencia de inversores brasileños ha incidido negativamente: “la verdad que con respecto a otros veranos, en situaciones normales, sin pandemia, la realidad era otra, siempre antes de cada temporada se daban ventas importantes y muchísimos terrenos, y la verdad que este año que se terminó han caído las ventas de forma muy importante, estamos hablando de entre un 50 y 60% menos y creo que hay incidencia directa de la no presencia de los brasileños porque sabemos que en la Laguna Merín, un porcentaje muy importante de propietarios son brasileños pero con todo esto obviamente que los inversores de Brasil tiene miedo de invertir porque después no pueden cruzar la frontera para venir a disfrutar de su propiedad en el balneario”, manifestó Javier Porto, quien insistió en que si bien en cuanto a los alquileres se pensó que iba a ser una temporada “muy buena”, en los hechos no se concretaron esas expectativas: “teníamos la expectativa de una buena temporada porque no se podía viajar a otros lados pero sin embargo ha caído el tema de los alquileres, hay casas e inclusive hay cabañas municipales que están disponibles para la segunda quincena de enero y febrero, que eso no pasaba en anteriores temporadas; me parece que la gente por temor al covid se quedó en casa realmente y se refleja en los negocios inmobiliarios, tanto ventas como alquileres, un bajón importante”, sentenció.
