En esta oportunidad, el hecho ocurrió en la localidad de Tupambaé, donde perros atacaron una majada de ovejas de una familia de pequeños productores de la zona.
Rabia e impotencia para estos vecinos que debido a estos hechos han optado por liquidar el remanente de lanares que tenían: “teníamos un lote de ovejitas y ahora me quedan 10, ya decidimos terminar con todo lo que nos queda, no queremos ni una más”, contó Laura Cruz.