VECINOS DEL BALNEARIO PLANTEARON LA NECESIDAD DE CONTAR CON UNA MAYOR FRECUENCIA DE ÓMNIBUS, CONTROLES BROMATOLÓGICOS, MEJORAS EN EL SERVICIO DE BAÑOS PÚBLICOS ASÍ COMO LA ASISTENCIA DE SALUD PERMANENTE
Tras la reunión mantenida entre integrantes de la Unión de Vecinos de Lago Merín y autoridades para definir algunos aspectos previos al inicio de la temporada, desde la comisión vecinal mantienen dudas en cuanto a la manera cómo se efectuarán los controles para evitar aglomeraciones de veraneantes en nuestro principal balneario.
Según dijo la presidente de la Unión Vecinal, se deberá seguir trabajando con las autoridades para definir la forma en que se aplicará el protocolo dispuesto por el Ministerio de Turismo: “el tema de los controles es una de las cosas más preocupante que tenemos en este momento, se habla de un aforo en la playa pero cómo se va a controlar”, señaló Graciela de Los Angeles.
En diálogo con Atlas, la representante vecinal evaluó positivamente la reunión mantenida con la asistencia de representantes de casi todas las instituciones convocadas, aunque según dijo algunos de los participantes se molestaron con el tenor de los planteos: “algunas de las autoridades entendieron que los reclamos que nosotros hacemos eran sumamente pertinentes, sobre todo en momentos donde tenemos que priorizar el cuidado de la salud de la población, otros actores políticos no sé si se sintieron aludidos o capaz que entendieron que los nosotros hacíamos era solamente reclamar y en realidad nuestra intención fue poner la temática sobre la mesa para discutir y tratar de encontrar soluciones, porque lo que pretendemos es empezar a discutir sobre las carencias que tenemos, no solamente quejarnos; tal vez algunas personas no entendieron los objetivos nuestros, nosotros en realidad lo que queremos es lograr mejoras para la gente del Lago Merín”, manifestó, reconociendo que algunos de los planteos presentados en la oportunidad generaron malestar en alguno de los presentes: “aparentemente molestó a alguno de los actores políticos, se sintieron aludidos y se retiraron prácticamente sin aviso”, agregó.
En cuanto los planteos formulados, el tema de los baños públicos, considerados “pocos” los que actualmente cuenta el balneario, así como también el cuidado y mantenimiento de los mismos; otro tema es el control de la velocidad de los accesos al balneario así como la construcción de garitas, planteando la necesidad de “reactivar” las frecuencias de ómnibus al balneario: “en este momento tenemos sólo una línea que llega al balneario a la hora 9 y vuelve a las 11 a Río Branco”, agregó.
Los vecinos también plantearon la necesidad de tener una “atención permanente” de salud en el balneario y no solamente durante la temporada, con la presencia de una ambulancia radicada en el lugar.