Autoridades municipales han defendido la atención que reciben las monas bajo cautiverio en el Bio-Parque de Melo. Aunque la organización animalista Hocicando el Corazón ha ratificado una denuncia ante el INBA por el mal estado de estos animales exóticos, Ángel Gasañol, referente del servicio municipal, asegura que las monas están bien alimentadas y que se está construyendo un nuevo encierro para mejorar sus condiciones. “Las monas están bien comidas, aunque ya tienen sus años y van perdiendo el pelaje. Denuncias no hemos recibido. Estamos abiertos al público y a escuchar a quienes tienen inquietudes. Las monas están bien atendidas y se les está haciendo un nuevo espacio para ellas, especialmente durante el invierno, cuando están más resguardadas”, declaró Gasañol.
DISCREPANCIAS CON EL GRUPO ANIMALISTA
Fernanda Saravia, representante de Hocicando el Corazón, señaló que tras una denuncia de un particular, la organización planteó su preocupación ante el INBA, reafirmando una denuncia de 2022 sobre las condiciones inadecuadas del espacio en el que se encontraban estos animales.“En ese momento, nuestra denuncia se centraba en el espacio inadecuado en el que habitaban las monas, aunque su estado físico no era un problema. Ahora, una de las monas presenta un estado físico preocupante, y estamos pidiendo una revisión veterinaria especializada. Queremos que las monas terminen su vida en un espacio acorde, pero hasta ahora no se ha logrado el cambio necesario”.
INTENCIONES DE TRASLADO Y CONTRADICCIONES
Gasañol afirmó que se han realizado gestiones para trasladar a las monas a otros bioparques, sin éxito debido a la falta de interés de otras reservas. Sin embargo, Saravia contradijo esta afirmación: “En 2022, la Intendencia nos dijo que había interés en trasladar varias especies, incluyendo las monas, a la reserva de Santa Teresa. Se nos aseguró que se estaban haciendo las gestiones, pero el traslado nunca se dio. Ahora nos dicen que no había interés de otras reservas, lo que contradice la información anterior”.
Saravia también comentó sobre el estado general del Bio-Parque, indicando que, en general, la situación era buena, excepto por el caso de las monas. Sin embargo, una denuncia reciente por una invasión de ratas ha generado preocupación: “Hicimos una visita y constatamos la invasión de ratas. Mantuvimos una instancia con la Oficina de Medio Ambiente, pero no hemos recibido una respuesta. Hoy desconocemos si se ha tomado alguna medida al respecto”, concluyó Saravia.