EL CIERRE DE SAMAN DESDE DIFERENTES ÓPTICAS: TRABAJADORES, PRODUCTORES Y ACTORES POLÍTICOS LOCALES

Diario Atlas

33 OPERARIOS AL SEGURO DE PARO, REPERCUSIÓN DIRECTA EN LA ECONOMÍA LOCAL Y UN PANORAMA CRÍTICO PARA EL SECTOR, CON UN ÁREA DE SIEMBRA QUE VUELVE A BAJAR ESTE AÑO

La disminución del área sembrada de arroz, tal cual lo había alertado la Asociación de Cultivadores, repercute en otro eslabón de la cadena.

La empresa Saman oficializó en las últimas horas el cierre de su planta industrial en la ciudad de Río Branco.

Se trata de una planta procesadora que era arrendada por Saman y en la que trabajaban más de 30 operarios, quienes en principio irían a seguro de paro y posterior despido, ya que la decisión de la empresa es el cierre de la planta aunque mantendría plantaciones en la zona de la tercera.

Los propios trabajadores de la planta Saman de Río Branco confirmaron a Atlas que la determinación de la empresa de cerrar la planta industrial los tomó por sorpresa: “el tema de la baja productividad, la baja entrada de arroz a la planta ya lo veníamos viendo, porque antes pensábamos dónde poner el arroz y hoy tenemos silos y galpones vacíos, la empresa todos los años presenta informes con respecto a las ventas, exportaciones, entonces lo veníamos acompañando, pero lo que sí nos impacta es que vengan un día y te digan que a los dos días te quedas sin trabajo pero la realidad la vemos día a día, la baja del grano en la zona es muy importante, estamos hablando de más de 100.000 toneladas en la zona, por eso se resolvió por parte del empresa centralizar todo en la planta de Vergara y asimismo les va a sobrar espacio, lo que deja en clara evidencia que la baja es realmente muy grande“, afirmó Dardo García, quien además confirmó que actualmente la planta industrial de Río Branco tiene almacenadas algunas toneladas de soja y también de arroz.

Según informó, la medida del empresa abarca la totalidad de los trabajadores, 33 operarios entre las dos plantas: “sabemos que es un momento bastante difícil para conseguir trabajo, hay un receso bastante importante de lo que es la mano de obra, estamos hablando de trabajadores de la industria que para el medio tenemos un buen ingreso, porque es un trabajo que tiene una buena remuneración, no fantástica pero es buena, pasar a trabajar en otra área donde ganas un poco menos, pero bueno, las personas tendrán que seguir adelante, la vida sigue, tenemos familias, aquí es toda gente trabajadora“, puntualizó, comentando que muchos de los trabajadores tienen más de 25 años de antigüedad en la empresa: “gente que ha trabajado toda la vida acá, realmente es muy doloroso, verle la cara a los compañeros que pasaron 20, 25 años acá adentro, con un gran sentido de pertenencia, que vengan y te digan que en dos días no tenés más trabajo, impacta, duele un poco, porque si bien veíamos la baja, no lo esperábamos“, sentenció.

MOREL: “YO A CORTO PLAZO NO VEO NINGÚN TIPO DE FUENTE LABORAL POSIBLE PARA TODO ESTE PERSONAL QUE HOY QUEDA EN LA CALLE”

Por su parte el alcalde de Río Branco también fue consultado por Atlas acerca de esta determinación de la empresa Saman de cerrar su planta industrial en aquella ciudad fronteriza. Cristian Morel reconoció que el impacto “va a ser bravo” para toda la zona: “es un tema complicado porque no está a nuestro alcance, a nuestro nivel de gobierno; son 33 familias que quedan en la calle, gente que tiene 18, 20, 22 años de trabajo, gente que le ha dado mucho a esta empresa, que hoy cierra sus puertas por una sencilla razón, ya están los estudios hechos, este año baja un 30% la producción de arroz, van a plantar un 30% menos y el año pasado ya había bajado significativamente el área, así que sinceramente nos preocupa y mucho”, enfatizó, reconociendo que la situación en lo que respecta al empleo en aquella ciudad se ha visto muy afectada en estos últimos días tras el cierre de algunas empresas, como el caso de la mediería SISI, y el constante envío de funcionarios al seguro de paro por parte de los free shop: “yo a corto plazo no veo ningún tipo de fuente laboral posible para todo este personal que hoy queda en la calle, esto va a repercutir muchísimo a nivel local, estamos muy preocupados“, sentenció.

SILVA: “CRÓNICA DE UNA MUERTE ANUNCIADA”

En tanto para los productores arroceros es crónica de una muerte anunciada. El productor departamental Juan Miguel Silva, consultado por Atlas, dijo que desde hace ya varios años los números del sector arrocero vienen en rojo, y cada vez es menor el área sembrada en el país: “esto no es más que un eslabón de una cadena que se viene rompiendo, lo venimos anunciando hace mucho tiempo, las cosas vienen muy complicadas, y es crónica de una muerte anunciada porque la reducción del área se viene dando y las industrias empiezan a tener muchísimos costos fijos que los tienen que achicar, es lamentable pero es lo que esta pasando“, afirmó.

Aclaró que la reducción del área no se da por capricho de los productores, sino por una coyuntura económica que no hace viable la rentabilidad del sector: “la ecuación económica no es favorable para nadie, los costos hacen que se reduzca el área, cada vez hay menos productores, el precio final hace que la cuenta del arroz no sea buena, tenés menos área y la industria se tiene que ir ajustando y se tiene que reestructurar para poder funcionar”, puntualizó, recordando que en Uruguay se alcanzaron a sembrar 200.000 hectáreas de arroz, mientras que en la actualidad el área no supera las 140.000, un 40% menos: “estamos con un problema muy grande de competitividad, el sector arrocero uruguayo está muy delicado, entonces no podemos vender y al no poder vender, la zafra que viene ya la tenemos como bastante más compleja, sin ir más lejos se estima que el área de siembra este año se va a reducir un 15% más”, sentenció.