“No soy el dueño de Cerro Largo, soy uno más del Partido”, dijo el intendente electo en una dura intervención ante el Directorio blanco
En la tradicional reunión del Directorio del Partido Nacional con los intendentes electos y los futuros jerarcas departamentales, realizada en la Casa del Partido, Christian Morel sorprendió con un discurso frontal cargado de reclamos hacia la dirigencia nacional y local. El intendente electo de Cerro Largo cuestionó duramente las prácticas de caudillismo y la falta de respaldo partidario durante la campaña, a la vez que reclamó una relación más comprometida y continua con el interior del país.
“El caudillismo y el liderazgo no te permiten llevarte el mundo por delante, andar avasallando y atropellando a la gente, ni mucho menos menospreciar a los compañeros de partido”, afirmó. En ese sentido, denunció que durante la campaña muchos dirigentes no se arrimaron por Cerro Largo por temor a una figura local que pretendía tener el control absoluto. “Muchos ni se aparecieron por miedo a alguien que se creía dueño del departamento”, dijo. “Quiero demostrar con esto que nadie es dueño de nada, los dueños son los ciudadanos que eligieron un cambio de gobierno”.
Morel no ocultó que se sintió solo en gran parte del proceso: “No sé si fue el Directorio, si fueron los líderes, pero hubo una gran ausencia. Me sentí muy solo. Muchos no quisieron ir porque decían que era peligroso. Simplemente quiero que los próximos líderes del Partido Nacional vean al interior durante los cinco años, no solo cuando hay campaña”.
También cuestionó con firmeza cómo se definieron las candidaturas en Cerro Largo, en plena etapa crítica de las elecciones nacionales. “En octubre, cuando teníamos que estar peleando por mantener el gobierno, en mi departamento estaban viendo cómo joder a uno de los candidatos, y ese era yo”, expresó sin rodeos. Relató que incluso se le pidió bajarse de la candidatura y que por no hacerlo “pagó un precio alto”, enfrentando ataques personales dentro del propio Partido.
En otro pasaje de su intervención, reivindicó el rol de los alcaldes y recordó su propio camino desde el Municipio de Río Branco a la Intendencia. “Soy el primer alcalde electo que llega a ser intendente en este país, y eso no es un dato menor”, subrayó, reclamando a sus pares que valoren el trabajo de los alcaldes, que también son electos por los vecinos.
Para cerrar, Morel dejó en claro cuál será su actitud como intendente: apertura, diálogo y cercanía. “No me voy a encandilar con los flashes. En mí van a encontrar a alguien que siempre va a estar dispuesto a escuchar”, aseguró. Y concluyó: “Yo no soy el dueño de Cerro Largo. Simplemente fui el más elegido. Soy uno más del Partido”.
