La Dirección Nacional de Bomberos ha emitido una serie de recomendaciones cruciales para evitar siniestros relacionados con el uso de estufas a gas, a leña y eléctricas. Jonathan Rosas, jefe del Destacamento local, destacó algunos consejos esenciales para un uso seguro de estos sistemas de calefacción.
Para estufas a gas y a leña, es fundamental realizar un mantenimiento adecuado antes de encender las estufas, incluyendo la limpieza del ducto de la chimenea. No usar acelerantes como nafta o gasoil para encender el fuego, sino métodos seguros como papel o leña fina. Mantener un mínimo ingreso de oxígeno para evitar la acumulación de monóxido de carbono. Las cenizas deben ser retiradas y enfriadas en un recipiente metálico antes de desecharlas en los contenedores de basura.
En cuanto a estufas eléctricas, es esencial revisar los calefactores antes de encenderlos cada año para asegurar que están en buen estado. Verificar que las instalaciones eléctricas soporten la carga de corriente requerida por los calefactores y prevenir cortocircuitos o sobrecalentamientos que puedan provocar incendios.
Revisar regularmente todos los sistemas de calefacción para asegurar que estén en buen estado es una recomendación general importante. Realizar una limpieza anual del ducto de la chimenea para eliminar residuos que puedan provocar incendios. Evitar sobrecargar las instalaciones eléctricas y asegurarse de que soporten el uso de calefactores. Enfriar las cenizas antes de desecharlas para evitar incendios en contenedores de basura.
Jonathan Rosas enfatizó que, aunque en Melo se han registrado algunas intervenciones relacionadas con estufas a leña y ductos de chimenea, la prevención es clave para evitar incendios y asegurar la seguridad de la población. Siguiendo estas recomendaciones, se pueden minimizar los riesgos y mantener un entorno seguro durante la temporada de invierno.