El referente en seguridad social resaltó la necesidad de una reforma que garantice sostenibilidad y equidad para las futuras generaciones
Rodolfo Saldain, uno de los principales exponentes en el debate sobre la reforma previsional en Uruguay, ha reafirmado la urgencia de transformar el sistema previsional actual. Durante una reciente charla en la Junta Departamental de Cerro Largo que lo invitó a participar en régimen de Comisión Social, Saldain mencionó que el objetivo principal de la reforma es asegurar su sostenibilidad a largo plazo: “La reforma no es una opción, es una necesidad imperiosa. Sin cambios, el sistema previsional no podrá sostenerse bajo las condiciones actuales.”
El especialista insistió en que el envejecimiento de la población es un factor determinante: “Estamos enfrentando una realidad demográfica que no podemos ignorar. Cada vez tenemos menos trabajadores activos y más jubilados, lo que coloca una presión insostenible sobre el sistema.” Además, resaltó que la reforma busca garantizar una mayor equidad, especialmente entre generaciones: “Es crucial que las futuras generaciones no queden atrapadas en un sistema que no les brinda garantías. La equidad intergeneracional debe ser un pilar de esta reforma.”
Saldain también abordó la necesidad de adaptar el sistema a las nuevas formas de empleo: “La forma en que trabajamos ha cambiado. Hay más trabajos flexibles, más trabajadores independientes, y el sistema debe adaptarse a esa realidad. No podemos seguir operando bajo las mismas reglas que hace décadas.”
En cuanto a los desafíos financieros, advirtió: “Sin ajustes, el déficit previsional seguirá creciendo, lo que pondrá en riesgo no solo las jubilaciones actuales, sino el bienestar general de la economía.” Para Saldain, esta situación requiere de soluciones estructurales, no paliativas: “No se trata de parches temporales. Necesitamos un cambio profundo, que permita que el sistema sea más eficiente y, sobre todo, justo.”
Concluyó su intervención haciendo un llamado a la responsabilidad colectiva: “El éxito de esta reforma dependerá del compromiso de todos los sectores. El diálogo es esencial, pero también la acción concreta y rápida. Estamos a tiempo, pero no por mucho más.”